domingo, 12 de julio de 2009

Si no se dice...




Clara Sanz con su nieta



Conocí a Inma, la hija de Clara Sanz Castillón (de casa Mallón) gracias a la web de Campo. Inma se encargaba de trasladar a su madre todo lo que yo le preguntaba y, después, me hacía llegar las respuestas que ella le daba.

Entre otras muchas cosas de las que tuve conocimiento gracias a mis dos «colaboradoras», hoy recuerdo especialmente la siguiente anécdota que Inma me transmitió de parte de su madre.

Parece ser que en Campo existía la tradición de que la primera vez que se le cortaban las uñas a un bebé se debía elegir a una persona que cantara bien, porque entonces (se decía) el niño o niña también tendría buena voz. Inma me explicó que fue su abuela materna la encargada de cortármelas a mi y que Clara también estuvo allí, mirándolo todo desde la primera fila.

Me imagino que debió haber un fallo en alguna parte (o la mamá de Clara no cantaba bien, o ya me había cortado las uñas otra persona que quería arruinarme la carrera como cantante, o precisamente soy yo la excepción que confirma la regla) pero lo que es seguro es que lo mío no es cantar… De todos modos, no guardo rencor a nadie y estoy contenta con la elección que mi madre hizo para una tarea tan delicada.

Hace unos meses hemos perdido a Clara. Si ella no me hubiera explicado esta anédota yo nunca la hubiera sabido. Y si no se cuentan las cosas (no se transmiten) al final se pierden para siempre. Como a pesar de ser una historia sin importancia, también nos habla de una tradición de Campo, por eso quiero compartirla con vosotros, para que no se nos olvide. Además, como hoy es mi cumpleaños, es una manera de recordar aquellos años...




1 comentario:

  1. He estado visitando vuestra página y me ha gustado mucho. Espero que os vaya muy bien. Un saludo de Jessica

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